Buscar sanar el pasado una y otra vez, mirando lo que nos hemos dicho durante años y años de lo que nos ha faltado, “si mamá… si papá… si la abuela… si mi hermano… si no se hubiera muerto…me hicieron esto… los compañeros de clase… el novio… la vida… el entorno…”.
Sí, todo ser humano ha pasado por una situación u otra, unas con mayor dureza (aunque la dureza siempre va en función a la perspectiva de la realidad que tenga cada persona) aquí estoy hablando de su experiencia y de lo que cada persona se explica de ella, esto hace que sea la visión que él tenga de las experiencias ajenas.
En definitiva, valoramos las cosas por buenas o malas, nos gustan o no, según la perspectiva familiar, individual, social, del país, de la región, habrá unas perspectivas u otras.
En los últimos años he visto grandes cambios y transformaciones personales, también he visto fracasos.
Lo verdaderamente significativo es que las personas que han realizado la transformación más importante son aquellas que se han impulsado hacia el futuro, siendo conscientes en quién querían convertirse y lo que es ciertamente efectivo, sentir que ¡ya eran lo que querían ser! A esto se le llama responsabilidad, consciencia despierta, el pasado no existe, no soy el pasado.
En este proceso ha sido importante modificar no solamente la perspectiva de como veían y actuaban; si no algo que todas tienen en común. Han modificado su lenguaje, han aprendido a cuidar su vocabulario con la dulzura con la que tú tratarías a un bebé. Las palabras sirven para describir la realidad y también tienen la capacidad de transformar tu vida, se convierten en el mapa por el cual transcurres en tu vida.
Una vez te he explicado esto, doy por hecho que entiendes perfectamente lo que te quiero decir.
Para obtener cambios se necesitan acciones completamente diferentes a las que hayas hecho hasta el día de hoy. Si los cambios no son lo suficientemente significativos, es que has estado en tu zona de confort, no ha sido del todo diferente, ha faltado acción masiva hacia tu objetivo y seguramente has tenido impulsos hacia la carencia y el miedo.
El miedo es la principal limitación para tener la vida plena que deseamos, miedo a brillar, miedo a ser quien realmente queremos ser, demasiadas preguntas, las mismas de siempre, con las mismas respuestas de siempre, la misma acción de siempre, el mismo resultado de siempre, impulsándonos desde una perspectiva falsa del pasado “creo que… me parece que… si hago, pasará… si no hago, seguro que…. Bla, bla, bla” Pasado inexistente, tú no eres tu pasado, tú no eres tus emociones, tú ya no eres quien eras cuando has empezado a leer.
El proceso de “Mentoring ReEnfocate Elite” seguramente es uno de los procedimientos más potentes durante 8 meses de tu vida para enfocarte hacia tu foco y sentirte acompañado/a durante el proceso de convertirte en quien quieres ser.
“Caminante no hay camino, se hace camino al andar, paso a paso, verso a verso”
¿Te suena verdad?
¿Tiene sentido verdad?
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