josepsantaularia.com
Sigmund Freud

Sanar

Tras la muerte de su padre, Sigmund Freud, se sumergió en un pozo de angustia y de dolor que le llevó a descubrir una evidencia, y lo dijo textualmente así:

“Mi recuperación sólo puede producirse mediante un trabajo en mi inconsciente; no puedo arreglarme con los esfuerzos conscientes solamente.”

Lo veo a diario con todas las personas a las que acompaño, por mucho que quieran cambiar algo, por mucho que se den cuenta y lo comprendan a nivel cognitivo, hay algo que les frena y les mantiene siempre en el mismo lugar. Repitiendo una y mil veces la misma situación.

Me pregunto ¿qué tiene que ocurrir en la vida de un ser humano para que salga de la repetición donde se ha metido?. ¿Es real que tiene que llegar una enfermedad, un malestar diario, una situación desagradable, una muerte, un accidente… para abrir los ojos de forma consciente?. Es cierto que el trauma, aquello que no tenemos sanado, aquella emoción que queda anclada como una impronta en nuestro cuerpo y en nuestro subconsciente tiene que revivir una vez tras otra llevándonos al mismo lugar de insatisfacción con la propia vida?

Como Mentor experto en psicoestructura familiar y juegos psicológicos he visto en mis formaciones grupales cómo el ser humano puede ir a ese lugar de su pasado donde se quedó anclado emocionalmente, puede revivir la historia, (la gran mayoría de veces distorsionada por el diálogo interno), sentir y finalmente sanar el impacto que causó ese trauma. Es un proceso, requiere tiempo, determinación, compromiso y mucha responsabilidad. La responsabilidad de la persona que se hace libre de sanar aquello que le pesa y le mantiene esclavo de su propia historia.

La gran lucha no está en mirar o no la herida, la gran lucha está en incluir todo aquello que excluimos como seres humanos. No se trata de nada más que de incluir en el corazón para poder sanar el Alma.

No esperes que las cosas cambien por arte de magia porque como dice Carl Gustav Jung “Hasta que no hagas consciente a tu inconsciente, va a dirigir tu vida y lo llamarás destino”.

 

Imagen: Wikipedia

Scroll al inicio