El sufrimiento es el resultado de la interpretación de las emociones del pasado.
Si te paras a pensar por un momento “¿porqué reacciono así?” No podrás asegurar con total seguridad, que lo que te dices a ti y a los demás sea del todo cierto, es solo una interpretación que haces de la información de tu pasado. Perdemos demasiado tiempo justificando solamente lo que creemos, por mucho que intentemos una y otra vez, hacer ver que somos la parte que defendemos.
Déjame que te pregunte, ¿qué hace que tengas la visión del mundo que tienes? ¿La puedes asegurar al 100×100? ¿Por qué tienes los amigos que tienes? ¿Por qué trabajas de lo que trabajas?
Tu explicación será una parte de la información que has interpretado y das como buena.
Esto hace que te sientas fraccionado. Dejamos de ser una unidad cuando solamente aceptamos una parte de la información y queremos que la información sea nuestro conocimiento. Tú ya no eres el niño/a que fuiste, tú no eres el que se hace pipí encima, ya no eres el que se hace caca, esto es tu pasado. Tú no eres tus pulmones, tú no eres tu cabeza, tú no solamente eres tu nombre. Todo esto es únicamente una parte de ti, ninguna de ellas te define, la unidad está en sanar tu pasado andando hacia el futuro.
Lo eres todo, absolutamente todo, puedes conseguir todo lo que quieras, solo necesitas cambiar, transformar lo que te explicas continuamente para dejar de estar donde estás. La información no lleva a ningún sitio sin el conocimiento, que es la experiencia de la información, también lo podemos llamar consciencia, abertura a todas las posibles posibilidades.
Todo es posible y solamente podrás ver que es así, cuando te preguntes “¿en quien quiero convertirme? ¿quién soy?”
Contesta estas preguntas sin las limitaciones de tu pasado, abre tu mente a lo grande, aquí no hay condicionamientos de cápsulas de tu mente antigua que te limitan. Al no haber limitación del pasado que ya no existe, te permitirás llegar donde quieras.
Cada vez estarás más en un estado de unidad y de conciencia de la consciencia, “EL NIRVANA” paz, gratitud y tranquilidad.
Abro la puerta a mi destino y salgo de un estado de somnolencia y sufrimiento existencial.
Ir de la mano en este proceso de transformación de un mentor, hace el proceso de despertar más liviano. Cuando te das cuenta de que el sufrimiento ha sido por algo que hoy ya no existe, se entra en la noche oscura del alma. Ir acompañado es uno de los mejores regalos que nos podemos hacer.
Aquí quiero dar gracias a todas y todos mis mentores por ayudarme a salir de ese estado de ensoñación limitante y tomar consciencia que todo lo que pasa ya no está.
Como decía Wittgenstein “estamos dormidos, nuestra vida es un sueño, pero de vez en cuando nos despertamos lo suficiente para saber que estamos soñando”
Tú no buscas a tu destino, él ya se preocupa de llamar a tu puerta, para que dejes de sufrir y aprendas en realidad quien eres.
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